Es tiempo de los cambios, yo me canso, de las lluvias, y del llanto, de las furias, yo me estanco, la lujuria, un espanto, aguas turbias, yo me escapo, es mi apuesta de mi triunfo. Con la fuerza de mi fruto, corazón no está en luto, sin salidas, yo las busco, fortaleza se la pido, una luz te la pido.

Le hablo al espejo, me muestra mis miedos, tristezas y los egos, pienso en mi sangre el espejo me lo recuerda, razones verdaderas para no estar ciego, si deseo el cambio en mi vida ahora es el tiempo.

Me miran con murmuros, el silencio del orgullo, difaman en mi mundo, no saben nada… Me quedo mudo, juramentan falsedades, las convierten en verdades, a mi no me afectan, almas vacías las inventan, con un frío me sonrió, me someto al olvido, de los falsos me despido.

Es tiempo de los cambios, las intrigas no necesito, acercarme a un dios bendito, escribir mi destino, aflorar lo que es visto, mi propósito demostrarlo, lo maligno ya callarlo, reparar mi corazón y amarlo, con una línea este poema cerrarlo, yo mis actos demostrarlo.