Sálvame a mi mismo, que no caiga en un abismo, que me pierda en el limbo, mi corazón tome ritmo, que me observes con cariño, no confunda mi destino.

Sálvame a mi mismo, de caer en garras de lujuria, no traicionar mi confianza, no traicionar la tuya, de no mirar hacia el lado, de regresar al pasado.

Sálvame a mi mismo, de no tener unos planes, de andar en otros mares, de que mi alma vague, de perderme en los bares, de mentirse a mi madre.

Sálvame a mi mismo. De cumplir la promesa, de amar si me besa, comprender si se estresa, confiar que me endereza, confiarle mi nobleza, no dudar su tropieza.

Sálvame a mi mismo, mantener mi pasión, no caer en tentación, no perderme en traición, mantener tu corazón, divertirme con razón, amar es mi intención.

Sálvame a mi mismo, de no apoyar a mis hijos, cualquiera sea su destino, respetar a los míos, confundirme en lo impío, no llevarlos en delirio.

Sálvame a mi mismo, de caer en algún vicio, de perderme en suplicios, ahogarme en sus líquidos, esclavizarle por lo que no es limpio.

Sálvame a mi mismo, de encerrarme en mi mundo, voltearme a lo oscuro, levantarme si retumbo, en no tomar un buen rumbo, superarlo si me inundo.

Sálvame a mi mismo, de sentir algún dolor, tampoco brindar dolor, de no olvidar su olor, de recordar esa canción, de solo brindarle amor.

Sálvame a mi mismo, de mantener mi inspiración, que mis letras tienen un don, de escribir con pasión, las personas aprecian con admiración, se reflejan con el don, de unas letras que escribo yo.